El aguacate, es la fruta carnosa que se obtiene del árbol tropical del mismo nombre. La corteza, gruesa y dura, presenta una coloración verde que varía en intensidad según la variedad.
La pulpa aceitosa es de color crema o verde amarillento, con un sabor similar a la nuez; contiene una única semilla redondeada de color pardo. El aguacate se puede adquirir durante todo el año. A diferencia de otras frutas frescas, carece de un sabor dulce o ácido característico, lo que le permite combinar adecuadamente con infinidad de platos. Es muy adecuado para el consumo en fresco, relleno de ingredientes tan variados como el cangrejo o el jamón. También se lo suele consumir ligeramente cocido y en puré. La pulpa del aguacate se emplea frecuentemente como si fuera mantequilla, una vez machacada y aliñada con limón y aceite o también se puede hacer el guacamole.