El ajo es una de las plantas de cultivo más antiguas. Se cultiva prácticamente en toda Europa. Es muy rico en alicina, que es un aceite etéreo sulfuroso, el cual determina el sabor típico de los dientes del ajo. No sólo condimenta todo tipo de platos, sino que determina además sus efectos terapéuticos. Actúa como un antibiótico natural contra los procesos inflamatorios, y en grandes cantidades puede reducir los índices altos de colesterol y la presión sanguínea.
Bulbos, raíces y tubérculos, Verduras y hortalizas
Ajo Blanco
0,75 €
Además de la alicina, el ajo contiene: hidratos de carbono, proteínas, lípidos, calcio, fósforo, magnesio, hierro, varias vitaminas E y vitamina C.